La propuesta apunta a una
composición lúdica, y alude a la representación visual del sonido y significado
del poema de Gabriela Mistral, “Carro del Cielo”. Reinterpretada a modo
subjetivo y personal, pretende traducir en formas, colores y relieves, la
melodía, ritmos, metáforas y simbolismo de sus versos. Cada Mural está
compuesto por 4 colores y, en efecto, es la misma relación de tonos en cada
mural, alterados en igual proporción tonal.
La intervención mural está
realizada en madera, pintada con pintura al agua de alta calidad, con pigmentos
saturados y sellados con barniz, brillante incoloro, de alta resistencia y
protección UV.